19:18h Madrid-Valencia; -360km's

La gente que no entiende esto dice que las amistades a distancia no sirven para nada, que los kilómetros nunca se van a vencer, y que estas amistades no llegan a ningún sitio. Bueno, para mi, eso es muy relativo, porqué quien tiene un amigo a distancia y sabe permanecer "a su lado" durante años, tiene un tesoro. Tener un amigo a distancia implica confiar en alguien a quien no conoces, que llega de casualidad, siendo un total desconocido y se vuelve más importante que cualquiera de las personas de las que ves a diario.
Yo, por suerte o desgracia, sé lo que es sufrir por este tipo de amistades, sufrir de modo que cuando tu amiga, -esa que está a 360 kilómetros y aún no has podido abrazar, esa con la cual no te has podido hacer tropecientas mil fotos y que te mueres por verla, y por contarle las mil cosas que os contáis por WhatsApp, en persona- sí, tu amiga, está mal por cualquier motivo y necesita más que nunca un abrazo, pero no cualquiera, uno tuyo, porque tú eres la que a pesar de la distancia está ahí animándola, contándole anécdotas de galletas para que se anime, y lo consigues, pero no de la forma en la que quieres... eso es sufrir. Y no sólo por una amiga que está a 360 km's, sino por varias, de aquí hasta Málaga pasando por Alicante y Jaén, y de aquí a Valladolid pasando por Madrid. Son varias personas, y más que han pasado, pero, se han acabado yendo, no por esa explicación de "las amistades a distancia no sirven de nada", sino porque no has congeniado bien con esa persona, o por mil motivos más.
Hoy, he vivido un momento más que precioso, una de mis mejores amigas ha visto a su amiga, sí, a su amiga a distancia. Nervios en el estómago, emoción, más emoción, lloros y risas, en eso ha consistido el momento en qué el AVE de Madrid ha llegado a Valencia.

 
Después de 20 minutos en la estación, al fin hemos visto aparecer el tren, los nervios se han puesto a flor de piel, tanto, que mi amiga ha acabado traspasándomelos jajajaja. Y como el otro día le dije, verla feliz estaba por encima de todo, y sigo con mi palabra, al ver ese abrazo me ha sido imposible no emocionarme, ¿por qué? porqué al verlas a ellas, me he imaginado que éramos mi mejor amiga a distancia y yo, que al fin, después de dos años podríamos conocernos, pero... de repente aterrizas, y te das cuenta de que solo estás grabando un video del abrazo, y haciéndolas mil fotos que sirva a modo de recuerdo, y a modo de que cada vez que lo vean, se acuerden de lo increíble que fue ese momento.
 
 
A vosotras, espero que os veáis muchos más días, y muchas más veces y que esté yo aquí o bien para quitarle las manchas de maquillaje a Mó, o bien para haceros mil fotos y videos.
 
 
Y a ti, fiel amiga, gracias por aguantarme día a día, gracias por confiar en mi y yo poder confiar en ti. Espero que nos veamos pronto. Ya sabes, tu pelirroja te adora.
 
 

Comentarios

Publicar un comentario